Confesión del Nadie.

Alguien con pocos problemas canta canciones sobre amor y sexo. Ese alguien no importa, es un Don Nadie. Se monta todas las mañanas en su mascota para matar a los malos. Su realidad es un sueño y su sueño es una utopia. Tiene un poco de dinero, un poco de amigos, un poco de ganas. Canta canciones de soledad y muerte. Este alguien no sabe lo que hace. Este alguien no soy yo, eres tú. Eres alguien que ni siquiera considera leer el resto de esto. No te culpo, extraño. Nunca sueña con la misma cosa. Un elevador que siempre baja, no tiene boton para subir. Irónico, ¿no?

Alguien que sabe lo que hace, siempre tiene la razón aunque nunca parece así. Dudan de él y él de los demás. No tiene sueños, solo realidades. Tiene mucho pero nada. Abajo. Se le pierde el control del televisor. Estornuda con fuerza. Sigues leyendo una confesión del Nadie, ya no.